viernes, 28 de septiembre de 2007

Jueces y políticos

Leo los periódicos de estos últimos meses y me hace gracia ver que la gente ponga el grito en el cielo por la relación entre la justicia y la política. Seamos serios. La justicia es un poder político desde la clásica división de poderes de Montesquieu, por tanto la relación es necesaria. No entraré a discutir si Montesquieu sólo era un traductor de Locque o si ya la división apareció en la Atenas clásica cuando los Tribunales populares (heliea) tenían tanto poder como la Asamblea de ciudadanos (ekklesía). Me quedo con la idea de que la justicia es un poder político.
Por tanto, si la legislación, es decir, el poder de hacer la ley está en manos de "diputados que son políticos"; la ejecución, es decir, la capacidad de llevar a cabo la ley está en manos de "ejecutivos que son políticos"; ¿por qué nos alarmamos de que la justicia, es decir, la capacidad de interpretar la legislación y de verificar su ejecución, esté en manos de "jueces que son políticos"?
Todos votamos, o mejor dicho, tenemos la posibilidad de votar cada cuatro años para elegir a nuestros diputados-políticos que hacen la ley (representación directa de los ciudadanos). Una vez elegidos, éstos eligen los ejecutivos-políticos (representación indirecta). ¿Qué ocurre con los jueces-políticos? Que los partidos políticos, según el número de escaños conseguidos, tienen la capacidad de elegir a los miembros de los órganos directivos del poder judicial. No eligen a los jueces, éstos tienen su carrera profesional dentro del sector (¿a quién representan?), sino a los que marcan las líneas de la justicia en España, ¿para qué? Para que la interpretación de la ley sea lo más cercana a la pretensión del legislador.
Jueces y políticos, esa es la definición de los jueces de hoy en día. Por un lado son jueces porque interpretan la ley y resuelven sobre ella, pero son políticos, porque la interpretación no es un mecanismo "objetivo", sino "político". Ya no podemos decir que la razón lleva al conocimiento único y objetivo, la verdad absoluta, sino a una "verdad" con mayor grado de aceptación que otras.
Es lógico por tanto, que los jueces estén vinculados a los otros poderes políticos. Nos guste o no. La independencia del poder judicial, como la separación de poderes es absurda, en tanto que el poder tiende a juntarse. Lo más que podemos exigir es un equilibrio de poderes para evitar tiranías. Ésa es la base sobre la que se asentó el pensamiento liberal democrático que tanto odian conservadores y socialistas. Si los jueces son políticos es normal que los partidos políticos luchen por controlarlos, léase que dejen en paz el Estatuto inconstitucional de Cataluña o que declaren constitucional la educación para la socialización. Es normal que los jueces y los partidos políticos salgan en portada, no podemos gritar por ello.
¿Por qué no discutir sobre el poder judicial? ¿Por qué no discutir sobre la "legitimidad" de unos señores para interpretar la ley que no han sido elegidos por el "pueblo soberano"? ¿Quiénes son los jueces? ¿Funcionarios que administran justicia o políticos que deciden el significado de las leyes? Los jueces son políticos, no gritemos tanto y hablemos más.

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